¿Cuáles son mis pensamientos iniciales sobre esta lección? ¿Hubo alguna palabra, frase o idea en particular que me llamó la atención, algo sorprendente, desafiante, reconfortante o alegre? ¿Cómo podría estar hablándome el Señor a través de esta lección?
¿Recuerdas cuándo o cómo fuiste más consciente de tu celo por el Evangelio? ¿Cuál fue la experiencia que te llevó a un encuentro real con el Señor resucitado?
¿Cómo tus “momentos de caída y resurrección” te han ayudado a transformar tu vida y tu celo apostólico?
¿Es suficiente el tiempo que paso en oración para dejar conscientemente que el Espíritu Santo me lleve a lo que Dios quiere de mí?